Versiòn tomada del diario El Tiempo.
Hay preocupación en el Cauca por el anuncio de las comunidades indígenas de esta región del suroccidente de Colombia, conocidas como misak, de bloquear, de nuevo, la vía Panamericana, este martes 20 de agosto.
La Panamericana es la columna vertebral que une al Valle del Cauca, Cauca y Nariño con el interior del país. Por eso, cada bloqueo implica millonarios impactos en la economía nacional.
No obstante, hay comunidades indígenas que exigen la firma de un decreto que reconocería a las Autoridades Indígenas del Suroccidente Colombiano (Aiso), como autoridad tradicional indígena para que sea de carácter público y especial nacional.
Es que el movimiento Aiso del resguardo indígena misak de Piendamó, en el norte del Cauca, y conformado por 3.000 habitantes y que representa a 52 autoridades de los pueblos nasa, misak y pijao, ha tomado la decisión de no seguir siendo parte de las tradicionales. En este caso, del Consejo Regional Indígena del Cauca (Cric). Miembros de Aiso señalaron que 131 personas no se ven representadas por el otro movimiento indígena.
“Es fundamental que la opinión pública, nacional e internacional entienda que en el movimiento Aiso no hay una estructura política por encima de las autoridades propias de los territorios, pues, para nuestro caso, son ellas quienes representan en el nivel local, regional, nacional e internacional, a diferencia de Cric, que tiene una estructura de consejería sobre las autoridades del territorio. Por ende, es claro que procesos organizativos externos y nuevos a la estructura política ancestral, no deben inmiscuirse en asuntos internos de gobierno propio”, dijeron miembros de este movimiento indígena, a través de un comunicado.
“El origen que tienen nuestras organizaciones es el fortalecimiento de la autonomía y la autodeterminación, como pueblo y nacionalidades originarias. Nuestra misión es juntarnos para luchar contra quienes históricamente han despojado nuestros territorios ancestrales y han querido desmembrar nuestras autoridades propias», se lee en el texto. «Si utilizamos la fuerza organizativa contra los nuestros (los que siempre hemos defendido), iremos en contra de nuestra lucha común, habremos defraudado a nuestros mayores, mayoras, mamas, taitas, que nos enseñaron a luchar contra enemigos reales y afectaremos al movimiento indígena deslegitimando nuestra voz de paz” , dijeron en Aiso, reflejando que pese a que han querido la unidad, no habrían encontrado condiciones para evitar esta anunciada separación.
Los compromisos
El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, hizo presencia en el sitio, realizando compromisos, con el fin garantizar el despeje de la vía.
Cristo manifestó que tiene la voluntad política para el diálogo y la concertación dentro de los marcos legales y constitucionales con Aiso.
El viceministro del Interior, Gabriel Rondón, manifestó que las comunidades más que divididas, tienen diferentes posiciones frente a varios temas, así como del Espacio Permanente de Concertación (EPC), en el que se reúnen más de 119 pueblos indígenas. El alto funcionario está atento a la situación.
Manifestó que «la idea no es firmar nada que viole la Constitución y las normas. Buscamos no profundizar las diferencias que hay internamente. El 20 de agosto es el tiempo que administrativamente cumplía el tiempo de observaciones. Están hablando de reconocerlos como autoridad, pero eso lo deben hacer internamente «.
Expresó que por eso, la Constitución plantea «que deben hacerlo ellos mismos, pues de lo contrario, se estaría violando la misma Constitución. Como Gobierno se escucharán a todas las partes y todos los pueblos deben estar de acuerdo».
Añadió que se han realizado alrededor de 14 reuniones con delegados de Aiso. El viceministro dijo que se entienden su autonomía y liderazgo, «pero se debe concertar entre todos, porque esa solicitud impacta a otros pueblos».
El exministro del Interior Luis Fernando Velasco se había comprometido con los voceros de AISO a firmar el decreto, dándoles el reconocimiento como “Autoridad tradicional Indígena de carácter público y especial nacional”.
De hecho, Velasco firmó un proyecto de decreto que no se pudo promulgar porque debían concurrir otros ministros con sus firmas «y, además, por ser una decisión de tal naturaleza tiene que ser primero consultada públicamente en el procedimiento legal que establece que primero se publica un borrador del decreto, se escuchan opiniones de la ciudadanía, especialmente, de las comunidades indígenas», indicaron fuentes para EL TIEMPO.
Con ese decreto, además de reconocer a Aiso como autoridad tradicional indígena de carácter público especial nacional se ratificaría, se fortalecería y se consolidaría “la Mesa Macrorregional Aiso de Diálogo, Coordinación, Concertación, Implementación, Seguimiento y Evaluación de las Políticas, Planes, Programas, Proyectos y Acciones con los Pueblos y Comunidades Indígenas que forman parte del Movimiento de Autoridades indígenas del Suroccidente (Aiso), al culminar la mesa permanente.
Esa finalización de la mesa se da justamente este martes 20 de agosto, por lo que se teme un nuevo bloqueo a partir de este día, en la vía Panamericana, uno que suma a 50 que van en el transcurso de este 2024.
Así, los acuerdos que los indígenas aseguran defender es lo establecido para esa mesa permanente, así como exigir la presencia de funcionarios de ministerios y de entidades del Estado en las jornadas programadas, según cronograma y haciendo seguimiento de los compromisos adquiridos anteriormente. También indicaron que otro de los compromisos fue el estudio de las propuestas de la comunidad Aiso.
Autoridades tradicionales están preocupadas, porque eso puede significar el fraccionamiento de la unidad de las comunidades indígenas en el Cauca.
Y es que no es la primera vez que sucede esta fractura dentro de un movimiento indígena. En el pasado, durante el gobierno de Álvaro Uribe, se intentó dividir a la comunidad misak con la creación de la Organización de Pueblos Indígenas del Cauca (Opic) y eso generó un problema de enfrentamientos que aún persisten entre los nativos.
En los pasados 29 y 30 de julio, integrantes del Aiso bloquearon el sector El Túnel, en Cajibío, que se encuentra ubicado en el norte del Cauca, en plena vía Panamericana.
“Estamos aquí ante la falta de diálogo con el Gobierno Nacional. Debido a los cambios en ministerios, no se han realizado las reuniones pendientes», expresó Mercedes Tunubalá, vocera indígena.
MICHEL ROMOLEROUX
Especial para EL TIEMPO