Miguel Ángel López, Zulay Durán Pacheco y su hijo de menos de un año, Miguel Herney López Durán, fueron asesinados el 15 de enero en el departamento de Norte de Santander. Este crimen marcó el recrudecimiento de la guerra en la región del Catatumbo a causa de los enfrentamientos entre disidencias de las Farc y el Ejército de Liberación Nacional (ELN).
Esta masacre atrajo la atención del país, ya que encendió las alarmas entre las comunidades, los entes territoriales y las autoridades ante la ola de violencia que se avecinaba.
El hombre que fue abatido al parecer pertenecía al Frente 33 de las disidencias. Previamente, se había solicitado una orden de captura en su contra para establecer su relación con el caso. Sin embargo, esta no pudo ser ejecutada:
“Pues hubo una persona que estaba vinculada en el proceso, pero fue abatida. Dentro de todo, le salió la orden de captura. La orden de captura se dio posterior al abatimiento, tras el enfrentamiento con la Policía. Él ya estaba vinculado al proceso investigativo por el homicidio. Desde un comienzo trabajábamos en la expedición de las órdenes de captura. Yo creo que fue casi simultáneo. En un procedimiento en Tibú, el Goes de la Policía lo abatió”, reveló el comandante Arévalo.
Los hechos habrían tenido lugar en una vía que conduce del municipio de Tibú a la ciudad de Cúcuta, cuando fueron interceptados por motocicletas y de manera indiscriminada desenfundan sus armas de fuego y disparan en contra de las tres personas en varias oportunidades, quitándoles la vida.
Desde un comienzo, este crimen que acabó con la familia López Durán se había atribuido al ELN. Sin embargo, a medida que avanzaron las investigaciones, se estableció que los autores materiales habrían sido miembros de las disidencias de las Farc.
Esta información ya había sido confirmada por el ELN en un comunicado emitido el 17 de enero de 2025 en el que aseguró que no tienen ninguna responsabilidad del triple homicidio: “Como es de público conocimiento, el pasado 15 de enero fueron asesinados el señor Miguel Ángel López, junto a su esposa, Zulay Durán Pacheco, y su pequeño hijo, Miguel Herney, hechos sucedidos sobre la vía que conduce del municipio de Tibú a la ciudad de Cúcuta. Informamos que el ELN no tiene ninguna responsabilidad en los hechos”.
El excomandante George Quintero, secretario de Seguridad y Convivencia de Norte de Santander, comentó en Noticias RCN: “Se habla de un tema relacionado con las disidencias de las Farc y, en este momento, se está adelantando la investigación. Creo que la Fiscalía es la entidad que debería manifestarse sobre la situación, al igual que los organismos de policía judicial. A nosotros lo que nos interesa en este momento es que hemos llegado al punto primordial de toda esta crisis”.
Se especula que este atentado estaría relacionado con la actividad laboral de Miguel Ángel López, esposo y padre de la familia asesinada. López era empleado de una funeraria y, días antes del crimen, habría sido el encargado de realizar los levantamientos de cuerpos que empezaban a aparecer en las vías públicas del territorio, una actividad que, al parecer, había sido prohibida por esos días por las organizaciones criminales.