Copenhague (EuroEFE).- La «flota fantasma» y las incursiones de drones de Rusia, que para Dinamarca constituyen una «guerra híbrida», centran este jueves la cumbre en Copenhague de los 47 líderes de la Comunidad Política Europea (CPE), que incluye a la Unión Europea y a otra veintena países del continente.
La capital de Dinamarca, país que ocupa la presidencia rotatoria de la UE, acoge esta séptima cumbre de la Comunidad Política Europea (CPE), un formato impulsado por el presidente francés, Emmanuel Macron, en 2022 tras la invasión rusa de Ucrania y que celebró sus encuentros previos en Albania, República Checa, Moldavia, España, Reino Unido y Hungría.
La primera ministra de Dinamarca y anfitriona de la reunión, Mette Frederiksen, destacó, en su intervención inaugural, la necesidad de que Europa pueda defenderse plenamente por sí misma en 2030 a más tardar, para lo que debe rearmarse ya a fin de poder hacer frente a la guerra híbrida rusa.
«Yo diría que 2035 será demasiado tarde cuando hablamos de rearmar Europa. Tenemos que ser capaces de defendernos totalmente diría en 2030″, indicó a su llegada a la cumbre.
«No solo hay ataques híbridos, hay una guerra híbrida en marcha en Europa en este momento», subrayó la jefa del Gobierno danés.
Mientras, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, dijo que «Ucrania tiene la experiencia necesaria” para ayudar a Europa ante las incursiones de drones y cazas en su territorio, y que su país ayudará a protegerse a naciones como Dinamarca.
La cita de este jueves sigue a una cumbre informal de los Veintisiete celebrada en la víspera, en la que se esbozó el llamado «muro antidrones», una nueva iniciativa europea dirigida a crear un sistema de detección, seguimiento e interceptación de vehículos aéreos no tripulados.
Aunque sería un proyecto propio de la UE e inspirado en el alto grado de desarrollo de este tipo de tecnologías de Kiev tras la invasión rusa, se espera que el sistema sea interoperable con la OTAN y que se enmarque dentro de la iniciativa «Vigilancia del Flanco Oriental».
Esta última ha sido impulsada en cooperación con la Alianza Atlántica para reforzar las capacidades de defensa terrestre, marítima (en los mares Báltico y Negro) y aérea y explorará otras áreas, como la del espacio, frente al abanico creciente de amenazas provenientes de Rusia.
«Mira lo que pasó con las incursiones en el espacio aéreo en Polonia y Estonia. Reaccionamos como OTAN, y también Polonia y Estonia como aliados, exactamente como se supone que debemos y deben hacerlo», dijo el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, a su llegada a la cumbre.
Lituania, escéptica sobre el «muro antidrones»
El presidente de Lituania, Gitanas Nauseda, manifestó su escepticismo sobre la posibilidad de implementar un «muro antidrones» a lo largo de toda la frontera oriental de la UE con Rusia, Bielorrusia y Ucrania, de 3.000 kilómetros, al opinar que es un proyecto «muy ambicioso».
Un sistema que pudiese proteger cada pulgada de suelo lituano sobrepasaría en coste al PIB del país, señaló el presidente lituano.
Nauseda dio a entender por ello que a la hora de implementar estas medidas de defensa antidrones, la UE debería adoptar un «enfoque selectivo» para proteger las zonas e infraestructuras más vulnerables y manifestó que la primera fase de este proyecto podría en teoría quedar completada antes del próximo marco plurianual europeo.
La capital lituana de Vilna está situada a solo 35 kilómetros de la frontera oriental con Bielorrusia, de 680 kilómetros de largo.
«Intentamos proteger aquellas áreas de la frontera que están más expuestas o que son más vulnerables, porque vemos que los drones vienen normalmente de Ucrania a través del territorio de Bielorrusia», afirmó Nauseda.
«Bielorrusia está intentando derribarlos también, pero no tiene éxito en todos los casos y entonces (los drones) vienen a la Unión Europea, a los Estados bálticos en primer lugar y a Polonia. Así que tenemos que proteger las zonas cercanas a nuestra capital, porque están en la trayectoria de los drones que vienen de Ucrania», explicó antes de participar en la reunión.
Por otro lado, el mandatario señaló que los incidentes más recientes han dejado claro que los drones constituyen una posible amenaza en toda la UE.
Noruega pide mejorar la capacidad de detección de drones
El primer ministro noruego, Jonas Gahr Støre, subrayó por su parte la necesidad de mejorar la capacidad de detección de drones ante la «incertidumbre híbrida» que están generando estos vehículos aéreo no tripulados en Europa.
«Este fenómeno de los drones que vuelan en nuestros cielos debe tratarse con más equipos para detectarlos y, posiblemente, derribarlos; y tenemos que trabajar tanto en la capacidad como en la metodología», dijo a su llegada a la cumbre.
Destacó el papel que están desempeñando los drones en la guerra en Ucrania y la «incertidumbre híbrida» que están creando en países de toda Europa.
Agregó que los países nórdicos y naciones del resto de Europa están colaborando para comprender mejor la amenaza que suponen los drones y apuntó que muchos habitantes tienen este tipo de aparatos para uso privado, lo que «se suma al reto que pueden suponer los actores externos» que crean la mencionada incertidumbre, afirmó sin mencionar a Rusia.
Støre señaló que, a pesar de que no es miembro de la Unión Europea (UE), Noruega sí es parte de Europa y en cuestiones de defensa y seguridad, por lo que participará de este refuerzo de la cooperación «contra la actividad no deseada de los drones».
Hace algo más de una semana, los aeropuertos de Kastrup (Copenhague) y de Gardermoen (Oslo) permanecieron cerrados al tráfico durante varias horas por el sobrevuelo de drones, que Noruega no ha atribuido, a diferencia de Dinamarca, a la amenaza rusa.
Macron y Starmer reclaman más presión contra la «flota fantasma» rusa
Durante un coloquio organizado en el marco de la cumbre, el presidente francés, Emmanuel Macron, y el primer ministro británico, Keir Starmer, llamaron a aumentar la presión sobre la «flota fantasma» rusa para cortar vías de financiación de Moscú y acabar con potenciales bases para drones.
La UE ya ha aprobado sanciones contra la también llamada «flota en la sombra», que ayuda al Kremlin a esquivar las restricciones contra el comercio de petróleo y de la que además Bruselas sospecha que puede estar detrás de los ataques a sus cables submarinos en los últimos meses en el mar Báltico.
Macron se refirió a la intervención militar de Francia en la víspera para abordar un petrolero ruso que se encontraba frente a la costa atlántica del país para controlar si está sirviendo de plataforma de envío y control de drones, una operación que se saldó con la detención del comandante del barco y su segundo dentro de la investigación por irregularidades en la identificación del buque.
El presidente francés destacó la importancia de frenar a la «flota fantasma» rusa por los ingresos que aporta a Moscú mediante el comercio clandestino de crudo evadiendo sanciones internacionales, así como por su utilidad logística para aeronaves no tripuladas.
«Cuando interceptamos estos barcos rompemos por completo la organización de esta flota, y esto es esencial para incrementar nuestra presión sobre Rusia con el objetivo último de que Ucrania pueda recuperar territorio», afirmó Macron en su coloquio con Starmer.
El líder británico se mostró de acuerdo con la necesidad de «intensificar» las operaciones militares y de autoridades costeras europeas contra los centenares de buques que continúan transportando crudo o petróleo refinado a pesar de las sanciones de la comunidad internacional contra Moscú.
El navío interceptado por Francia cambió en varias ocasiones de pabellón y de nombre, una de las prácticas habituales de los navíos de la «flota fantasma», que también cuentan con propietarios opacos con sede en paraísos fiscales, transpondedores que a menudo se apagan cuando se transfiere la carga en alta mar y zonas de fondeo en aguas internacionales para evitar los puertos.
Estonia reclama más sanciones contra la ‘flota fantasma’ rusa
El primer ministro estonio, Kristen Michal, reclamó por su parte que se impongan nuevas sanciones a Rusia centradas en el «comercio en negro» en el ámbito energético, que según dijo proporciona aproximadamente la mitad del «fondo de guerra» de Moscú para la guerra de Ucrania.
El primer ministro estonio, cuyo país limita con la denominada ruta del mar Báltico empleada por los petroleros de la conocida como ‘flota fantasma’, señaló que además suponen un riesgo ambiental.
En mayo, las autoridades estonias intentaron detener a uno de estos petroleros que pasaba cerca de sus aguas territoriales y, como respuesta, un caza ruso entró brevemente en el espacio aéreo estonio para intimidar al barco estonio que escoltaba a la embarcación de vuelta a aguas rusas.
Presionar por la paz en Ucrania
En cuanto a la guerra en Ucrania, uno de los temas centrales de la cumbre de la CPE, Michal afirmó que es necesario presionar a Rusia para que acceda a unas conversaciones de paz.
«A veces, lo que para nosotros es cortesía para ellos es debilidad«, advirtió.
Macron también afirmó que la situación de Ucrania «es ahora mejor que a principios de año» debido a iniciativas como «la coalición de los dispuestos» en apoyo a Kiev o a los pasos dados por el presidente estadounidense, Donald Trump, para reabrir el diálogo con el líder ruso, Vladímir Putin, con vistas a lograr la paz.
Tras la cumbre en Alaska (EE.UU.) del mandatario ruso con Trump del pasado agosto, «ha quedado claro que Putin no ha sido sincero cuando habló de su disposición a negociar la paz», dijo Macron.
El presidente francés también destacó la necesidad de incrementar la ayuda militar a Ucrania y, en concreto, de aportarle más sistemas de defensa aérea, drones y misiles de mayor rango.
La anfitriona de la cumbre, la primera ministra danesa, recordó que la Comunidad Política Europea fue precisamente creada «como una respuesta para unirnos a todos» frente a la agresión rusa contra Ucrania, recordó la mandataria danesa, quien llamó a todos los asistentes a alinearse en torno a «la seguridad de Europa» y pese a que algunos de los países «vean muy lejana» la amenaza rusa.
«Tenemos que rearmar a Ucrania, es la mejor forma de mantener la defensa de Europa y tenemos también que reforzar las defensas comunes europeas. Ahora mismo estamos de camino, pero debemos movernos mas rápido debido a que Rusia ha intensificado sus ataques híbridos», afirmó Frederiksen.